La calma de la ciudad de Ticul se rompió al amanecer con un hecho que sacudió a toda la comunidad: un feminicidio seguido del suicidio del presunto agresor.
El ataque en plena calle
Eran alrededor de las 6:30 de la mañana en la calle 32, entre 9 y 11, del barrio de La Mejorada, cuando Vanessa Yazmín P.O., de 42 años, circulaba en su motocicleta. En ese momento, fue interceptada por dos sujetos en otra moto, uno de ellos su pareja sentimental.
El hombre, identificado como César Guadalupe C.Ch., de 44 años, descendió del vehículo y, tras una confrontación, presuntamente sacó un arma blanca con la que atacó directamente a la yugular de la víctima. La herida resultó mortal: Vanessa cayó de su motocicleta y murió desangrada en cuestión de minutos.
El intento de suicidio del agresor
Tras cometer el crimen, el presunto feminicida intentó acabar con su propia vida ingiriendo herbicida. Testigos que presenciaron la agresión alertaron de inmediato al 911.
Elementos de la policía municipal y servicios de emergencia acudieron al lugar, trasladando al agresor primero al hospital de Ticul y posteriormente al Hospital General “Dr. Agustín O’Horán” en Mérida, donde falleció horas más tarde.
Una ciudad en shock
El doble desenlace dejó un profundo impacto en la población. Vecinos del barrio expresaron consternación y temor, mientras que en redes sociales circularon mensajes de indignación por la violencia feminicida que sigue cobrando vidas en Yucatán.
La tragedia reaviva el debate sobre la urgencia de reforzar medidas de prevención y atención a la violencia de género, un problema que persiste y que, como en este caso, termina arrebatando vidas y dejando una huella imborrable en la comunidad.