La jornada del 29 de enero amaneció con un inusual movimiento en la plaza de Oxkutzcab. Desde tempranas horas, los comerciantes y compradores se reunieron en el centro de abasto para negociar los precios de los productos del campo, en medio de un ambiente marcado por la escasez y el aumento de la demanda.
Uno de los productos que acaparó la atención fue la calabaza local. Hasta hace unos días, su precio se mantenía entre los 500 y 550 pesos por caja de 18 kilogramos, pero en esta jornada se vendió a 400 pesos, reflejando una ligera baja en su valor. Sin embargo, el pepino mantuvo su tendencia alcista, alcanzando los 500 pesos por caja, lo que ha generado preocupación entre los compradores habituales.
El aguacate local, otro de los productos con alta demanda, se ofertó en 500 pesos por caja, lo que confirma la tendencia al alza en los precios de los alimentos. Mientras tanto, los cítricos presentaron variaciones: el limón persa sin semilla tipo exportación osciló entre los 250 y 280 pesos, mientras que el limón grande, destinado al mercado local, se comercializó en un promedio de 250 pesos por caja. La naranja dulce también registró un leve incremento, pasando de 100 a 130 pesos por caja, mientras que la toronja y la mandarina local mantuvieron precios estables de 80 y hasta 130 pesos por caja, respectivamente.
A medida que avanzaba la mañana, los comerciantes ajustaban sus precios según la disponibilidad de los productos. La oferta y la demanda juegan un papel crucial en la plaza de Oxkutzcab, donde los compradores buscan aprovechar las mejores oportunidades antes de que los precios cambien nuevamente.
Con la incertidumbre sobre las variaciones diarias en los costos de los alimentos, los productores y comerciantes continúan atentos a la dinámica del mercado, mientras que los consumidores esperan que la estabilidad regrese pronto a la Huerta del Estado.