Bajo el sol abrasador del puerto y con la solemnidad que la ocasión ameritaba, autoridades, descendientes y ciudadanos se reunieron ayer en el parque Mártires de Progreso para conmemorar el 101 aniversario luctuoso de aquellos hombres que, en 1924, dieron su vida en defensa de los derechos laborales.
La ceremonia, encabezada por el alcalde Erik Rihani González y el jefe de Vinculación y Educación de la Secretaría de la Cultura y las Artes (Sedeculta), Enrique Pérez Polanco, no solo recordó los hechos de aquel 22 de marzo, sino que también lanzó un mensaje contundente: la memoria histórica es una brújula para el futuro.
Un homenaje a la lucha y al sacrificio
Frente a la capilla de Guadalupe, el teniente coronel José de Jesús Ramírez Díaz, miembro de la Logia Simbólica “Francisco Morales Góllez”, y el cronista Pedro Bermúdez Solís relataron con detalle cómo Piedad Luna, Cecilio Pérez, Luis Zaval y Francisco Morales Góllez fueron llevados al cementerio y fusilados, marcando un antes y un después en la historia laboral del puerto.
El eco de aquellos disparos sigue resonando en la memoria de sus descendientes. Martha Karina Morales Moreno, en representación de las familias Morales Sansores, Morales Trejo y Herrera Morales, tomó la palabra con voz firme y agradeció el espacio para rendir tributo a su bisabuelo, reafirmando el compromiso de preservar su legado.
Flores, palabras y compromiso con la memoria
Las ofrendas florales colocadas en el cementerio municipal y en el monumento a Francisco Morales Góllez, ubicado en la calle 31, fueron un símbolo tangible del respeto y la admiración que aún despiertan estos mártires. La presencia de la escolta y la banda de guerra de la policía local, así como la participación de Elena B.R., alumna de la secundaria Progreso, quien dirigió el juramento a la bandera, le dieron al evento un aire de solemnidad y continuidad generacional.
Como parte de las actividades conmemorativas, el Ayuntamiento de Progreso, en coordinación con la Logia Centenaria Francisco Morales Góllez No. 13, inauguró en la Casa de la Cultura una exposición fotográfica en memoria de Francisco Morales. Esta muestra, abierta al público hasta el 5 de abril, busca acercar a las nuevas generaciones a un episodio clave en la historia del puerto.
El homenaje concluyó con un llamado a la reflexión. A un siglo de aquel trágico suceso, el mensaje sigue vigente: la lucha por la justicia y la dignidad de los trabajadores no debe olvidarse.