El 29 de septiembre día de San Miguel Arcángel es la primer ofrenda para recibir a los muertos. Se ‘copalea’ la casa y se ruega al señor que le permita a los muertos bajar a su fiesta y acompañarnos.
La segunda ofrenda es el 18 de octubre día de San Lucas. Se ruega a que se dé permiso a quienes murieron en desgracia, con violencia, traicionados, o que hubieran cometido alguna falta.
El 28 de octubre día de San Judas Tadeo, es cuando se empiezan a realizar las compras de veladoras, para ofrendar a este santo, además se inician los preparativos de la fiesta.
El 30 de octubre se prepara todo para la celebración que está en víspera de iniciar, por lo que muchos ya elaboran el altar en este día, para colocar las ofrendas al día siguiente.
El 31 de octubre inicia la celebración con las ofrendas dispuestas para los niños y angelitos, se ha de hacer el camino de pétalos de flor de muerto para la llegada de los infantes difuntos.
El día 1 de noviembre es el Día de Todos Santos, porque los niños han muerto sin pecado y se considera que son santos. Se habrá dispuesto en el altar de tamales de dulce, golosinas, chocolate, pan y fruta.
El día 2 de noviembre es Día de los Fieles Difuntos, es la celebración grande en general. En el altar se colocan tamales de chile, bebidas que gustaban a los adultos, frutas, pan, cigarros y ofrendas diversas.
El 30 de noviembre día de San Andrés, es el día que se despiden a los muertos con la última ofrenda y el levantamiento del arco.