Las huelgas en dos importantes hoteles de la capital yucateca concluyeron el domingo tras la mediación de los gobiernos estatal y federal, logrando acuerdos laborales entre los trabajadores sindicalizados y los representantes patronales.
De acuerdo con un comunicado de la Dirección de Comunicación Social del Poder Ejecutivo local, los paros en el hotel Los Aluxes, que comenzó el viernes 7, y en el Hyatt Regency Mérida, que inició el sábado 8, finalizaron luego de la revisión salarial y contractual entre el Sindicato de Trabajadores de la Industria Hotelera, Gastronómica y Similares del Estado de Yucatán (afiliado a la CTM).
Desde hace al menos 10 o 15 años no estallaban huelgas en corporativos hoteleros de Mérida. Estos paros, que duraron aproximadamente dos días, impactaron la operación de los hoteles al provocar la reubicación de más de 600 huéspedes.
En el caso del hotel Holiday Inn, cuya huelga estaba prevista para el lunes 10 de febrero, se logró evitar mediante la mediación gubernamental.
En Los Aluxes, empleados y patrones alcanzaron un acuerdo definitivo que permitió la reanudación de actividades desde el mediodía del domingo. Entre sus demandas figuraban un aumento salarial del 30 %, 60 % de prima de antigüedad, 30 días de aguinaldo, seguro de vida por 50 mil pesos, canasta básica de 3 mil pesos mensuales, bono de puntualidad de 700 pesos, cena de Navidad y Año Nuevo de mil pesos cada una, y un 3 % de fondo de ahorro. Aunque el comunicado oficial no detalla los acuerdos finales, trascendió que los trabajadores aceptaron un incremento salarial del 15 % en lugar del 30 % solicitado.
En el hotel Hyatt Regency Mérida ocurrió un desenlace similar, con el reinicio de actividades el domingo. No se especificaron más detalles en el comunicado gubernamental.
Por otro lado, en el Holiday Inn se evitó la huelga, asegurando su operación normal. Los acuerdos alcanzados serán formalizados ante el tribunal correspondiente este lunes 10 de febrero.
El Gobierno estatal reiteró su compromiso de dar seguimiento a los acuerdos para mantener a Yucatán como un referente nacional en certeza jurídica, respeto mutuo y colaboración entre empleadores y trabajadores. No obstante, el Ejecutivo local no detalló en qué consistió la intervención del gobierno federal para resolver la huelga.
A lo largo de este conflicto, el sector hotelero de Yucatán evitó pronunciarse, dejando que el gobierno morenista de Joaquín Díaz Mena asumiera la vocería del caso.