Progreso no siempre fue el puerto moderno que hoy conocemos. Hubo un tiempo en que la vida transcurría entre calles de arena, bicicletas oxidadas y barcos que eran más sueños que industria. Esa historia —la de los días simples y los orígenes compartidos— vuelve a respirar a través de “Progreso de mis recuerdos”, una galería fotográfica que revive el pasado del municipio con 18 poderosas imágenes.
La muestra fue inaugurada por el Ayuntamiento de Progreso, a través de la Dirección de Cultura y en colaboración con la escuela Cetmar No. 17, como parte de las celebraciones por el 154 aniversario de la fundación de la ciudad. El espacio permanecerá abierto al público hasta el 30 de julio, invitando a locales y visitantes a reencontrarse con las raíces del puerto.
Durante el evento inaugural, en representación del alcalde Erik Rihani González, el director de Cultura Cruz David Chan agradeció a Cetmar por su participación y reiteró el deseo del Ayuntamiento de sumar más escuelas a futuras ediciones. “Esta exposición es parte de la visión de nuestro presidente municipal: acercar la historia local a todos”, expresó.
La curaduría fue realizada por Ileana Esquivel Fuentes, quien explicó que se seleccionaron 18 imágenes luego de revisar un archivo de más de 180 fotografías históricas. Las piezas están organizadas en tres ejes: vida cotidiana, infraestructura y comisarías, ofreciendo un recorrido visual que no solo documenta, sino que emociona.
Para Lorena Delgado Blas, directora del Cetmar 17, esta iniciativa va más allá de una exposición. “Es una manera de preservar el patrimonio cultural y fomentar el orgullo de pertenencia entre los jóvenes que muchas veces desconocen las historias que construyeron este puerto”, señaló.
Así, entre rostros anónimos, calles antiguas y embarcaciones que ya no navegan, Progreso se mira en el espejo de su pasado. Porque a veces, recordar también es resistir el olvido.