Mientras miles de visitantes disfrutaron de playas, balnearios y destinos turísticos durante la Semana Mayor, en el sur del Estado, una noticia pasó casi desapercibida, pero que merece ser contada: el operativo de seguridad implementado por la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), en coordinación con las policías municipales —incluida la de este municipio—, arrojó un saldo blanco.
Sí, en una de las temporadas de mayor afluencia de personas y movilidad del año, no se registraron incidentes graves que lamentar. Tras bambalinas de los festejos religiosos, las procesiones, los paseos familiares y el turismo, los cuerpos de seguridad suspendieron vacaciones y se desplegaron con un solo objetivo: proteger.
Aunque los delitos más comunes en esta zona siguen siendo el robo a casa habitación, los percances viales y algunas faltas administrativas, la acción preventiva y la vigilancia constante hicieron la diferencia, según reportes locales.
Un dato curioso: las acciones de la SSP y los informes diarios también se han trasladado al mundo digital. Una página en Facebook —cuyo administrador aún es desconocido— ha comenzado a difundir las detenciones, operativos y actividades preventivas que se realizan en esta zona, incluyendo casos de narcomenudeo y delitos menores. Aunque la falta de claridad sobre su procedencia genera dudas, lo cierto es que ha servido como canal alternativo de información para la ciudadanía.
Para las y los oficiales que patrullaron estas calles bajo el sol o la lluvia, la frase “saldo blanco” no es solo un dato técnico: es el reflejo de jornadas de vigilancia, de madrugadas sin descanso y de un compromiso silencioso con la seguridad de todos.
Esta Semana Santa no dejó huella de violencia. Y en tiempos donde las malas noticias suelen dominar las portadas, esta crónica ofrece un respiro… aunque sea momentáneo.