Un joven originario de Cancún, Quintana Roo, intentó extorsionar a sus padres pidiéndoles dinero, al fingir su secuestro.
El sujeto, de nombre Kennet, decidió irse a Valladolid con sus amigos y luego pedirle rescate a sus padres para volver a su casa, alegando haber sido secuestrado.
Se averiguó que fue apoyado por sus amigos quienes de inmediato llamaron a sus padres, a quienes les pidieron un millón y medio de pesos de rescate.
Al no tener esa cantidad de dinero, el padre del joven acudió ante la autoridad policial, la cuál se dedicó a buscar el teléfono por geolocalización para obtener indicios del paradero del presunto secuestrado.
Los agentes lograron detener a los dos presuntos secuestradores, quienes, al ser trasladados ante la autoridad, confesaron que se trató de un autosecuestro.
Los jóvenes llevaron a la policía a la vivienda en donde estaba la supuesta víctima, la cuál fue hallada jugando videojuegos.